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Tres estudiantes de la UBA se destacan en el Mundial de Programación y se ubican entre los mejores del mundo

En un hecho histórico para la Argentina y Latinoamérica, un equipo de la Universidad de Buenos Aires (UBA) compuesto por Carlos Miguel Soto, Ivo Pajor y Lautaro Lasorsa, estudiantes avanzados de Ciencias de la Computación y Ciencias de Datos, se coronó campeón latinoamericano y se ubicó entre los 13 mejores equipos del mundo en el Mundial de Programación ICPC (International Collegiate Programming Contest), que se celebró en Luxor, Egipto.

Un logro sin precedentes

El resultado obtenido por los jóvenes argentinos es considerado el mejor en las últimas dos décadas para el país y la región. El equipo logró resolver la misma cantidad de problemas que el equipo de la Universidad de Varsovia, que se ubicó en el puesto 12, a solo 15 minutos de diferencia, lo que les valió el reconocimiento y la admiración de la comunidad internacional de programación.

Un desafío de ingenio y trabajo en equipo

El torneo ICPC reúne a los mejores estudiantes de programación del mundo para competir en una prueba que exige no solo conocimiento técnico y creatividad, sino también la capacidad de trabajar bajo presión y en equipo. Durante cinco horas, los participantes deben resolver una docena de problemas complejos utilizando una sola computadora.

Problemas que ponen a prueba la mente

Los desafíos que enfrentan los equipos en el ICPC son de gran complejidad y requieren un alto nivel de pensamiento abstracto y capacidad de resolución de problemas. Algunos ejemplos de estos problemas incluyen:

  • Desarrollar un algoritmo para encontrar el tercer dado que le gane a uno y pierda con otro en un juego de dados con una propiedad estadística específica.
  • Programar el recorrido más eficiente para ir de un punto a otro de una ciudad, o de una ciudad a otra pasando por sitios intermedios.

Una experiencia enriquecedora

Para los estudiantes de la UBA, participar en el ICPC ha sido una experiencia invaluable que les ha permitido poner a prueba sus habilidades, aprender de los mejores del mundo y conocer a otros apasionados por la programación.

Un futuro brillante para la programación argentina

El logro de Soto, Pajor y Lasorsa es un claro ejemplo del talento y potencial que existe en Argentina en el ámbito de la programación. Su participación en el ICPC no solo es un orgullo para la UBA y el país, sino que también sirve como inspiración para las futuras generaciones de programadores argentinos.

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